Harry entró a tu casa, te buscó por la cocina, baño y tu recamara, no te encontró, salió al patio y allí estabas, de rodillas en el césped, llorando con tus manos en la cara.
Corrió hacia ti, se arrodilló a tu lado y te abrazó.
-Harry: ¿Qué pasó? ¿Qué te hizo?
-Tu: le dije todo, me golpeo y me insultó.
-Harry: es increíble ¿no tiene corazón? ¿Por qué le dijiste?
-Tu: leyó tu mensaje, no podía mentirle.
-Harry: ¡rayos! Por mi culpa te golpeo <te abraza> discúlpame.
-Tu: no te disculpes, yo tengo la culpa por no decirle desde el principio, se estaba comportando de una manera diferente y lo arruiné todo, por un momento se emocionó al saber que podría ser padre, pero todo se derrumbó al decirle que también podría ser tuyo.
-Harry: quédate tranquila, averiguaré para saber de quién es el bebé antes que nazca.
-Tu: no sabes cuánto quisiera que tú fueras el padre.
-Harry: <sonríe> ¿Por qué?
-Tu: porque sé que lo amarías por sobre todas las cosas, lo cuidarías y protegerías y serias el mejor ejemplo, en cambio Liam, quizás lo ame, cuida y proteja, pero no estaría segura que fuera el mejor padre.
-Harry: yo también quisiera estar seguro de que es mío, aunque sé que aun así no estarías conmigo.
-Tu: sabes Harry, cuando te dije que me gustabas era enserio, me gustas, pero no soy buena en esto, me enamoré de Louis y el rompió mi corazón, en ese momento juré no volver a enamorarme, pero fue en vano, me volví a enamorar, esa vez de Liam, pero nunca le importé, ahora me obliga a estar con él, no puedo enamorarme, me da miedo que rompan mi corazón una vez más, no puedo confiar en nadie más.
-Harry: te entiendo y me encantaría hacerte cambiar de parecer, pero antes tengo que conquistar tu amor, nunca antes me había enamorado y en realidad no sé si lo estoy porque no sé cómo se siente, pero te juro que solo gustarme sería muy poco, siento una gran conexión cuando estoy contigo y prometo no rendirme.
-Tu: <bajas la mirada> lamento no poder darte una oportunidad.
-Harry: <sonríe> ¡no te preocupes, ya me la darás! Ahora ven, levántate <se levantan> tienes que descansar.
Entraron a la casa, Harry se despidió de ti y se fue, tú fuiste a bañarte y te acostaste en tu cama, no podías dormir, pensabas muchas cosas ¿Qué pasaría si te enamoraras de Liam o de Harry? ¿Liam cambiaría? ¿Harry te lastimaría o enserio te quería? ¿Cómo tomaran todo esto tus padres? Muchas más preguntas daban vueltas en tu cabeza, hasta que lograste dormirte.
A la mañana siguiente despertaste debido a que alguien tocaba la puerta; caminaste maldiciendo quien te haya despertado, ya en la sala/living miraste el reloj que marcaba las 10:15 a.m. ¿Quién podría ser a esa hora? Pensabas que era Niall así que sonriente abriste.
Pero al ver quien era realmente tu rostro cambió rápidamente y diste unos cuantos pasos hacia atrás algo asustada.
-Tu: ¡¿Qué… que haces aquí?!
-Liam: vine a disculparme, no sabes cuánto me duele que al verme tus ojos me demuestren miedo, quiero cambiar eso. Perdóname, pero no tolero la idea de compartir algo que realmente quiero con ese… chico.- suspira
-Tu: <lo miras> ¿me quieres?
-Liam: aunque no lo creas si, por eso quiero cambiar <se acerca a ti> y aunque no sé si el bebé es mío o no, también lo quiero.
-Tu: ¿y si mi bebé es de Harry, aun quisieras cambiar?
-Liam: ojala no sea de él, pero aun así cambiaré, ¡Lo Prometo! Perdóname por todo por favor <te abraza> lo siento.
-Tu: ¿tendré que hacerlo siempre?
-Liam: prometo no tener que pedírtelo de nuevo.
-Tu: si en verdad me quieres, ¿Por qué no dejas de obligarme?
-Liam: porque sé que no querrás estar conmigo.
-Tu: si tan solo no me sintiera presionada ni obligada, Talvez te llegaría a querer.
-Liam: <suspira> quiero ver cómo crece el bebé.
-Tu: lo harás, al igual que Harry. Ahora solo debo relajarme <pones tu mano en su mejilla> ayúdame a estarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentame anda, a que esperas!:)