Capitulo 34 (2T)

(Maratón 8/10)
Llegaste a la casa y te encontraste con tu linda prima hablando muy cerca de Harry y coqueteandole a lo que Harry permitía, él la miraba con deseo y lujuria y ella solo sonreía. 

No dijiste nada, solo subiste a tu recamara, dejaste las bolsas de compras en la cama, buscaste a tu perrito, le colocaste su correa y saliste con él de tu casa.

Preferiste salir de ese lugar que tal vez aguantar algunas escenas que no te gustaría ver ni escuchar.

Caminaste a paso lento por la calle mientras tu cachorro seguía tus pasos meneando su alegre cola. Te detuviste en el parque y te sentaste en una banca, le soltaste la correa al pequeño perro y lo tomaste entre tus brazos.

-Tu: te dejaré en libertad por unos minutos ¿ok? Cuando te llamo vienes, no quiero que te pierdas ¿entendido?

El perro solo movía su cola y lamía tu rostro, lo dejaste en el suelo y este empezó a correr, no hiciste nada, solo lo dejaste jugar. 

Luego de un rato miraste el reloj que marcaba las 6:43 pm ya había oscurecido, te levantaste y empezaste a buscar a bebé, pero no aparecía, ya empezabas a odiarte por haberlo dejado solo sin correa. 

Buscabas y buscabas algo desesperada hasta que alguien tocó tu hombro espantandote un poco.

-Xxx: ¿este perrito es tuyo?

Volteaste y sí, tenía a Bebé en sus brazos. Rápidamente lo agarraste y abrazaste, te había asustado pensar que lo habías perdido.

-Tu: eres desobediente, te dije que no quería que te perdieras... Gracias Liam ¿donde lo encontraste?

-Liam: solo pasaba por aquí y lo encontré mordiendo algo, pensé que era de la calle pero te escuché y supuse que era tuyo

-Tu: gracias, pensé que lo había perdido

-Liam: no te preocupes, ya está contigo 

-Tu: sí -te sientas en una banca

-Liam: ¿puedo sentarme contigo?

-Tu: amm... Sí 

-Liam: gracias <se sienta a tu lado> ¿quieres mucho a ese perro?

-Tu: lo amo, es como si fuera mi bebé... El bebe que no pude tener -susurraste

-Liam: perdóname, me siento tan mal por haberte hecho tanto daño. No sé como fui capaz de hacer lo que hice, pagué las consecuencias por mi culpa perdiste a un ser que a pesar de haber nacido ya amaba y eso me dolió tanto como a ti. ¿Recuerdas a Susan?

-Tu: sí

-Liam: se escapó del centro de rehabilitación en donde estaba, estuvo saliendo con un delincuente peligroso por un tiempo hasta que sus enemigos lo encontraron y terminaron con su vida al igual que la de Susan. Pensaron que no sería buena idea dejar viva a una cómplice que podría acusarlos así que la mataron -dijo triste

-Tu: Dios, Lo siento tanto <pusiste tu mano en su hombro> sé que no nos agradábamos, pero nunca le desearía la muerte a alguien 

-Liam: lo sé, es muy triste esto pero hay que seguir adelante, pienso que todo es un castigo para mi, por haberte dañado. No quiero terminar encerrado como Susan y mucho menos muerto, pero lo que menos quiero es que me odies para siempre. Sé que lo que me merezco es eso odio y mas odio, cualquiera puede odiarme, pero no quiero que tú lo hagas

-Tu: no te odio Liam

-Liam: no te entiendo. Yo sí me odio y quisiera retroceder el tiempo justo al momento en que me escribiste y yo te pedí que me eliminaras, si no hubiera sido tan tonto, te hubiera hablado y quizás hubiera salido contigo y nada hubiera pasado. Pero me creía el mejor, y no soportaba que me ignoraran pensé que solo sería diversión pero se me fue de las manos, me obsesioné y terminé lastimándote, Hice justo lo que mi papá le hizo a mi mamá

-Tu: ¿de que hablas?

-Liam: todo lo que te hice, fue como si volviera a repetir lo que mi papá hizo. Amenazaba a mi mamá, la golpeaba, la lastimaba. Yo no nací por ser planeado, mi papá abusó de ella y entonces allí fue donde yo existí, mi mamá sí pudo tenerme y a mi papá le pasó lo mismo que a mi al enterarme de que tendría un hijo. 

*Flashback*
-Liam: ¿puedo?

Dijo señalando tu pequeño vientre, quería acariciarlo; Tú tomaste su mano y la colocaste en tu vientre, Liam empezó a mover su mano acariciándolo.

-Liam: <sonríe> ¡Ojalá sea mi bebé! ¿Qué quieres que sea?

-Tu: no lo sé, sea niño o niña, lo amaré.

-Liam: a mí me gustaría que fuera una niña, para intentar peinar su cabello y consentirla al momento de lastimarse; también quisiera que fuera un niño para jugar con él a las luchas o fútbol. Simplemente quisiera que fuera mi bebé ¿Te gustaría que fuera mío?

-Tu: con todo lo que me has dicho, tal vez sí.

-Liam: _________, regresa conmigo, te juro no lastimarte, dame una oportunidad.

-Tu: no es fácil, debo pensarlo.

-Liam: está bien.

Se levantó sobre sus rodillas y acercó su rostro hasta tu vientre dándole un beso, luego fue a tus labios, te besó y nuevamente se acomodó a tu lado.
*Fin Flashback*

-Liam: y entonces cuando yo nací mi papá cambió, se entregó en cuerpo y alma a mi madre y no volvió a hacerle daño. Sé que eso es lo único que no pasará contigo, porque no me perteneces, ya sé que no estamos destinados a estar junto y a quien quieres es a Harry. Pero haré todo lo que pueda para que me perdones

-Tu: te perdono 

-Liam: ¿de verdad? ¿No estas jugando?

-Tu: no Liam, no juego. De verdad te perdono

Liam sonrió, se sentía bien, se sentía aliviado. No pudo contenerse y te abrazó, pasando sus brazos alrededor de tu cuerpo apretándote. Hace mucho no te abrazaba y sentía la necesidad de hacerlo. Tú correspondiste a su abrazo apretándolo más.

-Tu: solo no lo hagas más < separándose > ni a mi, ni a ninguna otra chica 

-Liam: te lo prometo -sonrió

Te recargaste en el asiento, ya era tarde pero no querías regresar a casa aún. Colocaste tu cabeza en el hombro se Liam y suspiraste.

-Liam: ¿que tienes?

-Tu: quiero mucho a Harry, pero a él parece importarle poco. Está como un tonto detrás de mi prima 

-Liam: entonces por eso estabas aquí sola, ¿has hablado con él?

-Tu: no, no quiero parecer una tonta

-Liam: solo habla con él sobre eso, si se sigue comportando igual es un grandisimo idiota por no saber valorar a una chica tan linda y perfecta como tú. 

-Tu: gracias, creo que ya debo regresar a casa, se hace tarde

-Liam: te acompañaría pero sé que si alguno de ellos me ve pensarían mal y tendrías problemas

-Tu: sí, no te preocupes, puedo ir sola 

-Liam: ok, cuídate

Te dio un ultimo abrazo, besó tu mejilla y se fue. Te aferraste más a tu cachorro y caminaste de vuelta a casa. Antes de entrar a la casa notaste que tu celular sonaba, una llamada de Harry.

/LLAMADA TELEFÓNICA/
-Tu: ¿que pasa?

-Harry: ¿donde estás?

-Tu: en la entrada de mi casa ¿que quieres? 

-Harry: ¿por qué me hablas así? Espera, no entres voy para allá

-Tu: bien
/FIN DE LLAMADA/

Suspiraste y te sentaste en un pequeño escalón en la entrada de la casa a esperar a Harry. 
Él llegó a los pocos minutos y se detuvo frente a ti

-Harry: ¿que te pasa?

-Tu: nada 

-Harry: ¿por qué me hablaste así? 

-Tu: te he hablado como siempre lo hago

-Harry: no, lo estás haciendo ahora, me hablas seco, ¿que hice?

-Tu: nada -te levantas 

-Harry: ¿recuerdas lo que pasó la ultima vez que estuviste ignorándome?

-Tu: te agradezco que me lo hayas recordado <bajaste la mirada> no estoy de ánimos, me siento mal

-Harry: ¿que tienes?

-Tu: no te importaría, por favor no me molestes -diste media vuelta y abriste la puerta

-Harry: pero... Ok, como quieras 

Harry se fue a su casa y tú entraste a la tuya, dejaste al cachorro en el suelo y subiste corriendo a tu recamara, Mandy estaba en la cama hablando por celular. 

Ese momento era uno de esos días en los que deseabas tener la recamara para ti sola, necesitabas estar sola sin alguien que te hiciera preguntas del por que tu estado de animo. 

No le dijiste nada a Mandy, solo entraste al baño a relajarte mientras el agua caía por tu cuerpo. Luego de un baño relajante, te pusiste tu ropa y bajaste por algo de tomar.