Capitulo 78

Saliste de la recamara y fuiste hasta la cocina.

En el refrigerador había unas botellas de wiski y vino; pensaste “¿por qué no? No pierdo nada”

Sacaste una botella y buscaste un vaso, serviste wiski en el y lo tomaste rápidamente haciendo que tu garganta se quemara con el liquido.

-Liam: ¿lista?

-Tu: cambio de planes, siéntate conmigo a tomar de esto

-Liam: no, toma tú, yo no quiero.


Estuviste tomando hasta que el contenido de la botella se acabó.

-Liam: listo ______, ya vámonos

-Tu: no, allá hay otra botella

-Liam: no, vamos

-Tu: ok, ok. Eres muy malo

Liam te ayudó a levantarte, estabas peor que la noche anterior, caminabas con mayor dificultad.

Al salir del hotel estaba el auto de Liam ¿Cómo llegó allí? Subieron al auto y fueron camino al departamento.

-Liam: <ríe> eres la única mujer que conozco que toma hasta emborracharse por terminar con su novio, debería ser al revés.


Llegaron y bajaste del auto sin decirle alguna palabra a Liam, subiste al departamento abriste la puerta y la cerraste detrás de ti de un golpe, caminaste hasta el sillón y te acostaste.

Harry estaba en la recamara intentando llamar a tu celular, pero le sonaba apagado, escuchó la puerta y bajó de inmediato encontrándote acostada en el sillón con los ojos cerrados y una sonrisa.

-Tu: ¡la mejor noche de todas! –gritaste

-Harry: ¿Dónde estabas?

-Tu: ¡Harry, me asustaste! –dijiste riendo

-Harry: ¿Dónde estabas? Creí que habías pasado la noche en casa de Niall, él fue al colegio y me dijo que te dejó sola en el parque anoche ¿Por qué vienes hasta ahora?

-Tu: sshh <sentándote y riendo> estas gritando

-Harry: no estoy gritando. Mira como estás, ¿con quien estabas?

-Tu: ¿eres detective o algo parecido? Estas peor que mi mamá

-Harry: estuve preocupado

-Tu: ¿por mi? <Ríes> ¡ay, que lindo! Pero no entiendo por qué si tú no eres nada mio.

-Harry: <hizo un gesto de tristeza> lo sé, pero, te amo y me importas

-Tu: <te levantas> ¿tú? <te tambaleas hacia él> Tú no me amas, si fuera así no te pondrías celoso.

-Harry: claro que si te amo, y por eso son mis celos, porque no quiero que estés con nadie más que yo

-Tu: ¿sabes? Estoy algo cansada, me voy a dormir

Le diste la espalda y caminaste hacia las escaleras, subiste algunos escalones tropezando, hasta que a pasos lentos lograste llegar hasta la recamara, al entrar te acostaste en la cama y antes de dormirte Harry entró.

-Harry: _______, me duele tu comportamiento y pienso que para no molestarte guardaré mis cosas y me iré.

-Tu: ¿Qué? ¿Te vas? ¿Por qué? Este lugar es de los dos

-Harry: no, es tuyo y yo no puedo quedarme aquí, te amo y no soporto estar mal contigo

-Tu: no quiero que te vayas, ahora no puedo pensar bien, por favor no te vayas, aun no

-Harry: está bien, descansa, esperaré a que te sientas mejor


Asentiste suavemente con la cabeza y cerraste los ojos quedándote dormida

Harry no había pensado claramente, era su culpa, culpa de sus celos, prefirió esperar a que te tranquilizaras para intentar arreglar las cosas contigo.


Ya eran las 6:56 p.m. tu estabas en la ducha, despertaste con el fuerte dolor de cabeza y tomaste una pastilla que te calmo un poco.

Al terminar de bañarte, te pusiste algo cómodo y bajaste a la sala/living donde se encontraba Harry.

-Tu: Hola

-Harry: hola, ¿Cómo te sientes?

-Tu: algo mal, pero ya tomé algo –sentándote a su lado

-Harry: bueno, ¿quieres comer?

-Tu: no, creo que si como algo lo vomitaré

-Harry: está bien

-Tu: ¿aun te quieres ir?

-Harry: nunca quise irme, pero no quiero estar aquí si estoy mal contigo

-Tu: yo no quiero que te vayas

-Harry: <se acerca a ti> dame una oportunidad, por favor, no puedo estar sin ti, sé que hice mal en atacarte con mis celos, pero son solo temor de perderte

-Tu: no lo sé Harry, no sé si podamos estar juntos sin que peleemos

-Harry: siempre habrán peleas, pero son pequeños obstáculos que sabremos pasar, solo dame una oportunidad, te lo pido.

-Tu: ….